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Cuartel General de la Comandancia General de Baleares

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Notícies

lunes 26 de febrero de 2018

Nombre: 009

El Consorcio de la Mola apoya la recuperación de un obelisco funerario que fue construido en la Fortaleza de Isabel II.

Presidente Permanente del Consorcio de la Mola

Presidente Permanente del Consorcio de la Mola

Puerto de Mahón

Puerto de Mahón

Plano del monumento

Plano del monumento

María Sveshnikova, redactora de la Agencia Rusa Vesti.Ru, acompañada por el Pope de la Iglesia Ortodoxa Rusa Andrey Kordochkin, han entrevistado al Presidente Permanente del Consorcio de la Mola, Coronel Benjamín Oriola y al Director del Museo Militar de Menorca, Capitán Francisco Javier Girona,  con la finalidad de publicitar y obtener fondos del gobierno Ruso para la recuperación de un obelisco funerario que fue construido en La Mola en recuerdo de los marineros rusos que murieron en Mahón entre 1769 y 1773 víctimas del escorbuto.

En 1769 durante la guerra entre Rusia y los turcos, Catalina II manda la flota del Báltico al Mediterráneo para abrir otro frente, la flota al mando del almirante Spirídov, con el permiso de los ingleses, llega a Menorca fondeando en cala Figuera (Puerto de Mahón).

La tripulación sufrió numerosas muertes en el puerto de Mahón. Los archivos militares confirman que hubo unos 367 enfermos (supuestamente del escorbuto) pero se desconoce el número exacto de los fallecidos que pudo haber superado a 200 personas.

Todos los fallecidos fueron enterrados en unas cuevas en Cala Figuera,

Cincuenta años después del fallecimiento de los marinos, el cónsul francés de Baleares, Froment de Champlagarde, que también representaba los intereses del Imperio ruso en esta región, decidió trasladar los restos de los marinos a un lugar más adecuado: el cementerio griego de la Mola. 

Cuando se realizó el traslado, el cónsul decidió levantar un obelisco de 11 metros de altura en este lugar, y precisamente este monumento quedó reflejado en el cuadro conservado en el museo de Moscú. El monumento fue levantado en 1820, pero más tarde, durante la construcción de la fortaleza Isabel II, a finales del siglo XIX, fue destruido posiblemente por constituir una referencia de puntería para el posible enemigo.

Ese monumento es el que se quiere reponer por parte de la Fundación Natividad de Cristo de la Iglesia Ortodoxa en Madrid.

El expediente está terminado y se dispone de todas las autorizaciones necesarias.