Equipos de movilidad al rescate

Equipos de movilidad al rescate

Equipos de movilidad al rescate

Equipos de movilidad al rescate

Dos ciudadanos nacionales han sido se­cuestrados por un grupo terrorista en un país extranjero y hay que poner en marcha una operación de rescate para dar con su paradero y liberarlos. Este supuesto, tan cercano a la actualidad, fue el tema central del ejercicio 'Mobility', planeado y dirigido por el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) 'Caballero Legionario Maderal Ole­aga' XIX, y desarrollado entre Alicante y Zaragoza a principios del mes de julio.

En él se dan cita los equipos de especia­listas en movilidad del Mando de Opera­ciones Especiales (MOE) para reforzar su preparación en esta faceta del combate, a la vez que se favorece el intercambio de experiencias y el conocimiento mutuo con otras unidades del Ejército, así como con otros países.

En esta ocasión, participó un equipo del 1er Regimiento Paracaidista de Infantería de Marina francés, que se unió a los equi­pos operativos del GOE XIX y el GOE IV para llevar a cabo la operación de rescate, en la que también estuvieron implicados una sección del Regimiento de Caballería Ligero Acorazado 'España' nº 11, un Equi­po de Búsqueda y Localización de Artefac­tos Explosivos (BLAEX) del Regimiento de Ingenieros nº 1 y un Subgrupo Táctico de Helicópteros de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra, formado por dos Ti­gre, dos Superpuma y dos Chinook.

Helitransporte

Los equipos operativos fueron helitrans­portados desde el acuartelamiento 'Al­férez Rojas Navarrete' (Alicante) hasta el Centro de Adiestramiento (CENAD) 'San Gregrorio' (Zaragoza), haciendo en el ca­mino escala en un punto de reabasteci­miento y municionamiento, ubicado en una zona de campo a 80 kilómetros de la capital aragonesa. El repostaje se realizó en plena noche, por lo que los implicados tuvieron que utilizar los medios de visión nocturna, y todo se desarrolló en ambien­te táctico. El Equipo de Reconocimiento Avanzado que vigilaba la zona, integrado por personal del GOE IV, se encargó de dar seguridad y cobertura a la maniobra.

Una vez completado el reabastecimien­to, los helicópteros continuaron cami­no hasta el punto de inserción, fijado en 'San Gregorio', de donde partió el equipo de acción principal hacia el polígono de combate en población de 'Casas Altas', el lugar donde se encontraban los rehenes. Así lo había confirmado la patrulla de reconocimiento especial que se había insertado tres días antes y había estado observando el objetivo.

Ante el peligro de aparición de fuerzas convencionales sobre el terreno, el equi­po francés hizo la cobertura al equipo de acción principal, debido a que cuenta con dos capacidades con las que hacer frente a este tipo de enemigo, que las pequeñas unidades no suelen tener: el misil con­tracarro MILAN y su preparación para la conducción de operaciones de combate próximo.

La presencia de un enemigo convencional junto al asimétrico, representados am­bos por los componentes de la Fuerza de Oposición del CENAD, constituyó una de las novedades de la edición del 'Mobility' de este año. «Se planteó un escenario con amenaza híbrida, más acorde a las misio­nes en las que estamos actuando actual­mente», explicó el oficial de operaciones del GOE XIX.

A pesar de la actuación del equipo fran­cés, el enemigo logró escapar, por lo que fue necesaria la intervención de la sección de Caballería que, posicionada para un combate de encuentro, se desplazó hasta localizarlo y eliminarlo.

Una vez completada la misión, los equi­pos volvieron a los helicópteros en el punto convenido y, tras una nueva pa­rada de repostaje, regresaron a la sede del MOE en Alicante. Allí se había desplegado el Puesto de Mando principal del ejercicio, mientras que en 'San Gre­gorio' se instalaron dos bases operati­vas avanzadas para el desarrollo de las operaciones.

Movimientos por carretera

Además de los desplazamientos aéreos que este año han destacado en el 'Mo­bility', otra de las facetas fundamenta­les y tradicionales de este ejercicio es la instrucción en el empleo de Vehículos de Alta Movilidad Táctica (VAMTAC) para rea­lizar incursiones y maniobras de aproxi­mación de Operaciones Especiales. Por ello, los vehículos empleados en las acti­vidades recorrieron la distancia que sepa­ ra Alicante de Zaragoza por un itinerario táctico de tres días por carreteras secun­darias y caminos, realizando los despla­zamientos fundamentalmente durante la noche y enfrentándose a todo tipo de in­cidencias, como emboscadas, artefactos explosivos improvisados y algún objetivo de oportunidad.

Pasados por agua

Además de la Fuerza de Operaciones Especiales desplegada en Zaragoza, en Alicante se constituyó otra a la que, pa­ralelamente, se le encomendaron otros cometidos. El más importante, la identificación y neutralización de un líder terrorista que había sido localizado en una zona deshabitada entre Villajoyosa y Benidorm.

La mejor forma de llegar hasta allí era por mar, por eso el equipo de agua del GOE XIX fue el encargado de infiltrarse me­diante un helocasting —que consiste en lanzar a un grupo operativo y su embar­cación sobre una zona de agua—. El salto de agua se efectuó frente al cabo Huertas, a una distancia de tres millas de la costa, y junto al personal se lanzó una embar­cación semirrígida con la que se aproxi­maron hasta la costa. Una vez cerca de la playa, un grupo de buceadores se encar­gó de reconocerla para permitir la llegada del resto de la patrulla.

A la noche siguiente llegaron los tiradores de precisión, que tomaron posiciones rá­pidamente gracias al trabajo de reconoci­miento de sus compañeros y se prepara­ron para cumplir la misión.

Nada más completarla, en otra ubicación cercana, otra sección del equipo de agua había intervenido en la liberación de una persona de relevancia (VIP, en sus siglas en inglés) que se hallaba retenida.

«Desde los helicópteros hemos lanzado mochilas, fusiles, embarcaciones..., han sido unas maniobras muy provechosas», reconocía el capitán jefe del equipo de agua. El objetivo era adiestrarse con los distintos medios de movilidad táctica, y los componentes del MOE no desaprove­charon la ocasión.