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Noticias

lunes 30 de noviembre de 2015

Número: 72

Mando de Adiestramiento y Doctrina.

Despedida de la Bandera en Granada.

El Jefe del MADOC presidió el acto.

El Jefe del MADOC presidió el acto.

El coronel más antiguo dirige unas palabras a los asistentes.

El coronel más antiguo dirige unas palabras a los asistentes.

Uno a uno, nuestros veteranos besan de nuevo su Bandera.

Uno a uno, nuestros veteranos besan de nuevo su Bandera.

El viernes 27 de noviembre, el claustro de Capitanía General fue escenario del solemne acto de despedida de la Bandera, de todos aquellos componentes del MADOC que a lo largo de 2015 han pasado a la situación de reserva. La noble enseña ante la que los veteranos depositaron su beso pertenece al Centro de Formación de Tropa nº 2.
Este acto, que se celebra un año tras otro, pretende ser un estímulo para los que todavía continúan en servicio, al resaltar en público el cumplimiento del deber de los más veteranos. El principal activo del ET consiste en las personas que lo integran y que contribuyen con su hacer diario a que la institución militar cumpla su misión. No hay trabajos grandes y pequeños, todos son importantes, la responsabilidad que se asume frente a la misión, determina la dimensión de cada soldado. La última formación de estos compañeros representa un modelo de vocación y obliga a los más jóvenes a intentar alcanzar su altura humana y profesional.
El acto fue presidido por el Jefe del MADOC, Teniente General D. José Carrasco Gabaldón que en sus palabras resaltó la dignidad, la honra y el respeto que producen aquellas trayectorias marcadas por el compromiso, el esfuerzo y el cumplimiento del deber. El responsable del Apoyo a la Preparación habló de la dura formación, de los valores que dan sentido a la vida militar y de la vocación de servicio a los demás.
A su vez el Coronel D. Julián Díaz Abad, como más antiguo de los veteranos, repasó con sus palabras los grandes cambios que se han producido en el Ejército en todos estos años, destacando: las diversas reorganizaciones, las mejoras en el armamento y material, el salto de un Ejército territorial por otro proyectable, la supresión del servicio militar obligatorio, la implantación del modelo profesional, la plena incorporación de la mujer, la integración en las  organizaciones internacionales, las operaciones en el exterior, y la preparación del personal al que definió como muy eficaces, altamente formados y plenamente conscientes del compromiso con el Ejército y con España. El Coronel Díaz Abad, también se acordó de los antiguos militares, aquellos maestros del día a día que le mostraron el camino, del orgullo de sus actuaciones, de su inquebrantable lealtad y espíritu de servicio que establecieron las bases  morales del Ejército de hoy.
Al acto, acompañaron a los homenajeados sus familiares y amigos y también asistieron las autoridades militares de la plaza de Granada.