Academia de Artillería

Future Artillery (FOTO: Internet)

Lanzacohetes HIMARS(FOTO: Internet)

Del 14 al 16 de mayo tuvo lugar en Londres el seminario “Future Artillery”, organizado por la empresa IQPC, que constituye uno de los foros sobre Artillería más destacados de la escena internacional. En el evento, que consistió en tres días de conferencias y paneles, tomaron parte tanto ejércitos de diferentes países como empresas de armamento.

Por parte del Ejército español asistieron al seminario el General Jefe del MACA, Excmo. Sr. D. Luis Torcal Ortega; el Coronel Jefe de la Jefatura de Adiestramiento y Doctrina de Artillería (JADART), D. Eugenio López Polo, y el Director de la Academia de Artillería, el Coronel D. José María Martínez Ferrer. Este último realizó una presentación sobre el sistema de apoyo al adiestramiento de los fuegos de que dispone el Centro de Simulación de la Academia, a la altura de los mejores y más modernos entre los ejércitos aliados.

Entre los ponentes más destacados figuraron el General Director de la Academia de Artillería de Francis, el General de Brigada Michel Delion, que detalló las lecciones aprendidas de la Artillería francesa en Irak, en la que participó con la “Task Force Wagram”, una Batería reforzada de piezas César de 155 mm autopropulsadas sobre  ruedas, que apoyó el cerco y asalto a la ciudad de Mosul; el Director de Armamento y material del Ejército de Ucrania, General de División Andrei Koliennnikov, que trató sobre las características de los apoyos de fuego en el conflicto del Donbass; el Jefe de la 1ª Brigada de Artillería del Ejército del Reino Unido, General de Brigada John Mead, que habló sobre la renovada importancia de los fuegos divisionarios en profundidad frente a la nueva amenaza que se dibuja en el Este; el Asesor especial sobre Fuegos del Comandante del USAREUR, el Coronel David S. Lee, que señaló el estado actual de los fuegos terrestres de los principales aliados europeos y las fuerzas americanas en Europa, desde el punto de vista norteamericano y las principales necesidades de mejora, particularmente en relación con el alcance, la precisión y la interoperabilidad de los sistemas de control de fuegos (ASCA), así como la importancia de la lucha contra los drones aéreos (C-UAS); el Jefe de Fuegos e Influencia del ARRC, General de Brigada Paul Tennant que, entre otras cosas, señaló que, en el actual escenario estratégico, la superioridad aérea ya no podía darse por descontada, como se venía haciendo en la última década, debiendo potenciarse la AAA orgánica terrestre; el Director de Artillería del Ejército de Canadá, Coronel Marc La Fortune  y una larga lista de responsables artilleros, principalmente del norte y este de Europa.

Igualmente, hubo ponencias de responsables del planeamiento y adquisición de materiales de artillería de diferentes naciones, así como de empresas fabricantes, principalmente relacionadas con materiales de artillería, municiones de precisión y sistemas de localización de objetivos, así como sistemas de simulación, posicionamiento, etc,..., que mostraron las diferentes posibilidades de la Artillería del presente y del futuro. En general, aparte de mejorar el alcance, los principales ejércitos aliados están dotándose o ya están dotados de una cantidad de munición de precisión, cara pero de prestaciones muy elevadas (Excalibur, Vulcano); otra cantidad de munición denominada “de casi precisión” (near precision), con espoletas tipo PGK (precision guided kit), más económicas y con precisión considerablemente mejorada respecto a la munición convencional; y se retiene la munición tradicional de 105 y 155 mm, haciéndose notar que en el escenario estratégico actual hay necesidad de disponer de los tres tipos de munición para optimizar su uso en función del tipo de objetivo y del efecto a lograr sobre el mismo.

Igualmente, en un escenario estratégico que ha superado el modelo exclusivo de la lucha contra la insurgencia del pasado decenio, respecto a alcances, hay una necesidad de disponer de sistemas de fuego que permitan batir objetivos  a alcances de más de 40 km para apoyo directo y de más de 70-80 Km para permitir el fuego en profundidad y de contrabatería (lanzacohetes MLRS/HIMARS); algunos países, como EE.UU., Francia, Reino Unido o Brasil han optado por disponer de fuegos terrestres de mayor alcance para batir objetivos estratégicos u operacionales con medios terrestres, sin delegar completamente esta capacidad en las fuerzas aéreas. Igualmente, en paralelo, se debe disponer de una capacidad de adquisición de objetivos que permita el empleo efectivo de estos alcances de las armas y un sistema de mando y control de fuegos eficaz e interoperable con el de los aliados.